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Conflicto Sin Precedentes entre Netanyahu y el Jefe del Shabak

2025-03-14

Autor: José

En medio de la festividad judía de Purim, que se caracteriza por los disfraces y la celebración, se han despojado las máscaras en la turbulenta relación entre Benjamin Netanyahu, el primer ministro israelí, y Ronen Bar, el jefe del servicio de seguridad interna conocido como Shabak. Este enfrentamiento ha llevado a un cruce de acusaciones públicas sin precedentes, jugando un papel crucial en la lucha entre el Gobierno de derecha y los organismos de seguridad, el Tribunal Supremo y la fiscal general, Gali Baharav-Miara. Este choque se produce en un momento en que el país se enfrenta a desafíos internos, justo después del devastador ataque del 7 de octubre de 2023, que había generado una pausa en las crisis externas.

Netanyahu ha denunciado a Bar, quien lidera un organismo que depende directamente de él, acusándolo de "liderar una campaña de extorsión y amenazas". Por su parte, Bar ha respondido a estas acusaciones alegando que son graves y que su tiempo está dedicado exclusivamente a los temas de seguridad y a la defensa de la democracia israelí: "Cualquier otra afirmación carece de fundamento".

La controversia emergió justo tras las declaraciones de Nadav Argaman, el predecesor de Bar, quien subrayó que como ex jefe del Shabak posee información crítica y advirtió que, si considera que Netanyahu actúa ilegalmente, podría revelar información que podría comprometer la seguridad nacional. Argaman se refirió en particular a sospechas sobre vínculos entre asesores de Netanyahu y Qatar, un país en el centro de las tensiones debido a su financiación de Hamas, el grupo terrorista que controla Gaza.

"Qatar ha sido el principal financista de Hamas durante la última década", señaló Argaman, añadiendo que si hay influencia de Qatar en la oficina del primer ministro, sería un grave peligro para la seguridad de Israel. Insistió en que Netanyahu debería ser el primero en exigir una investigación sobre estos vínculos.

La reacción de Netanyahu no se hizo esperar; calificó las declaraciones de Argaman como un cruce de una peligrosa línea roja en la democracia israelí. Prometió presentar una denuncia por chantaje y prácticas mafiosas, señalando que la acusación de Argaman se suma a una campaña de ataques a su gobierno.

El llamado 'Qatargate' ha incrementado los rumores sobre el deseo de Netanyahu de destituir a Bar, pero la posibilidad de que el Tribunal Supremo cancele tal decisión por conflicto de intereses es un obstáculo. En reuniones recientes, Netanyahu presionó a Bar para que dimitiera, pero Bar se resiste por temor a que su posible reemplazo se base más en lealtades políticas que en el interés del estado. Además, Bar ha asegurado que asumirá la responsabilidad por no haber previsto el ataque de Hamas, como hizo el jefe del ejército hace diez días, si se considera que eso es parte de su responsabilidad.

El Shabak es crucial no solo en la lucha contra el terrorismo, sino también en la defensa de los principios democráticos de Israel, lo que confiere a su director una posición de alta relevancia en el manejo de información de seguridad sensible. A medida que este conflicto se desarrolla, muchos en Israel están observando de cerca, preguntándose cuál será el impacto a largo plazo en la estabilidad del gobierno de Netanyahu y en la seguridad del país.