Salud

¡Crisis Sanitaria! El retraso en el acceso a fármacos causa 1.715 años de vida perdidos en pacientes con cáncer mamario HER2+

2024-11-18

Autor: Antonio

El acceso rápido y equitativo a medicamentos innovadores no es solo una necesidad, sino una urgencia que puede determinar la vida o la muerte de miles de pacientes con cáncer. En España, la situación es alarmante: el tiempo que transcurre entre la aprobación de nuevos fármacos por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) y su inclusión en el Sistema Nacional de Salud (SNS) está privando a los pacientes de tratamientos que podrían salvar sus vidas.

Un estudio reciente de la Fundación ECO, respaldado por IQVIA, revela que entre 2018 y 2021, los medicamentos oncológicos aprobados por la EMA tardaron una media de 611 días en estar disponibles para los pacientes españoles. A principios de 2023, el 43% de estos medicamentos aún no eran accesibles, una situación que causa indignación entre los profesionales de la oncología.

Impacto devastador en la vida de los pacientes

La investigación pone en manifiesto el impacto de estos retrasos: no solo se traduce en pérdida de tiempo y oportunidades de tratamiento, sino en una clara disminución de la esperanza de vida. Se estima que el retraso en la disponibilidad de fármacos oncológicos ha resultado en la pérdida de 1.715 años de vida potencial en pacientes con cáncer de mama HER2+. Esta cifra estremece, pero la realidad es aún más cruda: hay miles de pacientes que sufren en silencio, esperando desesperadamente tratamientos que podrían cambiar su destino.

Para enfocar el análisis, se eligieron dos moléculas innovadoras: trastuzumab deruxtecán y sacituzumab govitecán. Ambas aprobadas para tratar diferentes tipos de cáncer de mama, tienen un potencial terapéutico que podría haber mejorado enormemente las tasas de supervivencia de los pacientes si se hubieran puesto a disposición a tiempo.

Años de vida y bienestar en juego

El trastuzumab deruxtecán, que es crucial para pacientes con cáncer de mama HER2+ no resecable o metastásico, ha visto cómo su retraso ha afectado a casi 2.700 posibles beneficiarios. La pérdida de 1.715 años de vida no es solo un número; representa historias, familias y vidas truncadas por un sistema que no se adapta lo suficientemente rápido. Además, se han perdido potencialmente 3.446 años libres de progresión de la enfermedad, lo que provoca un dolor doble: la angustia por la enfermedad y la frustración por la ineficacia del sistema de salud.

Por otro lado, el acceso tardío a sacituzumab govitecán ha impactado igualmente a más de 2.000 pacientes, resultando en la pérdida estimada de 883 años de vida y 559 años libres de progresión. En total, se trata de un panorama sombrío que exige un cambio inmediato en la política sanitaria.

¿Qué se puede hacer?

La solución está en manos de las autoridades sanitarias. El Ministerio de Sanidad está trabajando en el Plan Estratégico de la Industria Farmacéutica, que busca acelerar el acceso a medicamentos innovadores y mejorar la competitividad del sector. Este plan, si se implementa con éxito, podría romper las barreras que actualmente limitan el acceso a tratamientos vitales.

Los expertos apuntan que cada día cuenta, ya que por cada día de reducción en el tiempo de espera, se podrían ganar años de vida y de calidad de vida para los pacientes. Este desafiante panorama no solo es una cuestión de compasión; también un imperativo económico, dado que el retraso en el acceso a tratamientos prolongará costes a largo plazo para el sistema sanitario debido a complicaciones que podrían haberse evitado.

La urgencia de actuar

El estudio de la Fundación ECO es un llamado a la acción. Es imperativo que se implementen con urgencia reformas en los procesos administrativos y regulatorios para garantizar que los pacientes oncológicos en España no sean víctimas de un sistema que les niega oportunidades cruciales para su salud y bienestar. En la lucha contra el cáncer, cada año, cada día y cada minuto cuentan. ¡Es hora de que el sistema actúe!