Un nuevo golpe se cierne sobre Sunsundegui, ya que 38 operarios de uno de sus proveedores de estructuras metálicas han sido despedidos debido a la falta de pagos de la carrocera de Alsasua. Esta drástica decisión fue anunciada la semana pasada, en medio de una crisis financiera que arrastra a la empresa, tal como han confirmado fuentes sindicales.

La compañía afectada, que cuenta con plantas en Etxarri Aranatz y Olazagutía, es fundamental para el suministro de materiales a Sunsundegui, que se encuentra en una situación precaria. Además, la carrocera de Alsasua ha lanzado un expediente de regulación de empleo (ERTE) que afectará a más de 300 trabajadores durante tres meses, una medida desesperada ante la inminente crisis.

Este anuncio de ERTE se produjo solo unos días después de que la consultora KPMG, encargada de diseñar el plan de negocio de la empresa, señalara en una comisión parlamentaria que uno de los principales problemas de la carrocera era el “sobredimensionamiento de la plantilla”. KPMG dejó claro que la rentabilidad de la empresa depende de ajustar la fuerza laboral a la producción actual.

En un giro irónico, a finales de 2023, la compañía había contratado a 150 personas para fabricar autobuses para Volvo, al mismo tiempo que se preveía aumentar su plantilla a 720 empleados para 2028, mucho más que los 300 con los que terminó 2023. Sin embargo, en enero de 2024, también tuvo que realizar nuevas contrataciones para cubrir vacantes críticas.

KPMG también advirtió que la situación financiera de Sunsundegui es alarmante, con el riesgo de agotar sus fondos de efectivo a principios de septiembre. La empresa se beneficia de anticipos de pago de Volvo, que han sumado 5,1 millones de euros entre febrero y agosto de este año, pero eso no será suficiente. La deuda total de la compañía se eleva a 48,8 millones de euros, con 8,9 millones adeudados a proveedores y 39,9 millones de deuda financiera.

La incertidumbre se cierne sobre Sunsundegui y sus trabajadores, lo que plantea serias preguntas sobre el futuro de la empresa y de los miles de empleos que dependen de su estabilidad. ¿Logrará Sunsundegui reponerse de esta crisis? El tiempo lo dirá.