Llegar a los 50 años y seguir ganando masa muscular es totalmente posible. Aunque es cierto que a medida que envejecemos, el proceso se vuelve más complicado, se puede lograr si se sigue una dieta adecuada y se realiza ejercicio de forma regular y específica. Es fundamental no solo mantenerse activo, sino enfocarse en un objetivo claro: aumentar la masa muscular. Para ello, es importante seguir varias recomendaciones de expertos en el campo del deporte.

Aroa Baladrón, entrenadora personal, enfatiza que la mayoría de las personas no están trabajando con la intensidad necesaria. "Lo que falla la gran mayoría es que aunque vayan haciendo pesas, no trabajan con intensidad", advierte Aroa. Esto es un error común, ya que aunque el uso de pesas está en aumento entre las personas mayores de 50, es crucial aplicar la intensidad adecuada. No solo se trata de hacer ejercicios, sino de realizarlos a un nivel que desafíe al músculo.

Como explica la entrenadora, "las personas no desafían al músculo como verdaderamente podrían hacerlo, se quedan en la zona de confort". Este comportamiento puede significar que no levantan suficiente peso o que no entrenan lo suficiente para llegar al fallo muscular. La fuerza y la intensidad son elementos clave para que el músculo crezca y para aumentar la fuerza general del cuerpo. Si el cuerpo no percibe el estímulo necesario, los resultados serán minimales o inexistentes.

Entonces, ¿qué significa realmente entrenar con intensidad? Se trata de desafiar al músculo al máximo. Una manera de alcanzar esto es realizando tantas repeticiones como sean posibles, siempre cuidando la técnica para evitar lesiones. Además, es crucial utilizar un peso que sea lo suficientemente desafiante: no debe ser tan ligero que puedas hacer muchas repeticiones sin esfuerzo, ni tan pesado que no puedas completar el ciclo.

Diversos estudios han demostrado que a partir de los 50 años, la pérdida de masa muscular puede llegar hasta un 1-2% anual si no se lleva a cabo un entrenamiento adecuado. Incorporar ejercicios de resistencia como el levantamiento de pesas, el entrenamiento en circuito y ejercicios de peso corporal puede ayudar a frenar este proceso y mejorar la calidad de vida.

Para quienes deseen iniciar este camino, Aroa recomienda empezar con 2 a 3 sesiones de entrenamiento de fuerza a la semana, combinadas con ejercicios cardiovasculares. Esto no solo ayudará a ganar músculo, sino también a mejorar la salud cardiovascular y la movilidad, elementos muy importantes a medida que se avanza en edad. ¡No dejes que la edad te detenga, comienza hoy mismo a trabajar por una mejor versión de ti mismo!