Un estudio reciente ha revelado que las centrales fotovoltaicas y los parques eólicos terrestres en Alemania son las opciones más económicas para la generación de energía, con costes que oscilan entre 4,1 y 9,2 céntimos por kilovatio hora, posicionándose por delante de las centrales de carbón y gas. Pero eso no es todo; el costo nivelado de la electricidad (LCOE) para los sistemas fotovoltaicos con baterías varía entre 6,0 y 22,5 céntimos por kilovatio hora, dependiendo de la ubicación y los precios de los sistemas de almacenamiento.

El investigador principal del estudio, Christoph Kost, del Fraunhofer ISE, destaca: “Estos cálculos demuestran que los proyectos a gran escala que combinan energía solar, eólica y almacenamiento en baterías son inversiones excelentes.” Las sinergias entre estas tecnologías permiten un uso más eficiente de la red eléctrica, optimizando así el suministro de energía renovable.

¡Sorpresa! El LCOE seguirá cayendo hasta 2045

Según las proyecciones, el LCOE de los sistemas fotovoltaicos pequeños en techos podría bajar a entre 4,9 y 10,4 céntimos por kilovatio hora, y los sistemas montados en el suelo a entre 3,1 y 5,0 céntimos para el año 2045. ¡Esto significa que inmediatamente más personas podrían optar por energía solar, llevando a una transición energética masiva!

¿Y qué pasa con los costos del hidrógeno y la biomasa?

Verena Fluri, coautora del estudio, sugiere que incluso los sistemas pequeños de fotovoltaica con baterías podrían alcanzar costes entre 7 y 19 céntimos por kilovatio hora para entonces, siempre que los precios de las baterías caigan drásticamente. Además, los nuevos aerogeneradores tendrían un coste de producción de entre 3,7 y 7,9 céntimos por kilovatio hora en tierra, creando una oportunidad increíble para la energía eólica, especialmente en mar abierto con su potencial de reducción de costes.

La necesidad imperiosa de energía flexible

Mientras que todo parece apuntar a un futuro brillante para las energías renovables, el estudio también advierte que se requerirán centrales eléctricas flexibles y controlables como respaldo. Las plantas de biogás y biomasa serán fundamentales para equilibrar el sistema energético. Los costes para estas tecnologías, como la biomasa sólida, van de 11,5 a 23,5 céntimos por kilovatio hora, mucho más competitivos que los de las tecnologías fósiles.

Esto plantea un dilema interesante: ¿hasta qué punto la dependencia de fuentes de energía fósil seguirá siendo necesaria? Según Paul Müller del Fraunhofer ISE, aunque las centrales de gas podrían funcionar de manera flexible en el futuro, su uso deberá ser minimizado. Se estima que necesitarán funcionar entre 1.000 y 2.000 horas anuales en 2045.

Conclusión: el futuro de la energía es renovable

Con los impresionantes avances y reducciones de costes en energía solar y eólica, los datos sugieren que es el momento de apostar por un futuro más verde. Las opciones de energía renovable no solo son más limpias, sino que también se están volviendo más accesibles económicamente. ¡El cambio energético está aquí y tú puedes ser parte de él!