
¡El dengue arrasa en las Américas y alarma a Europa! ¡Entérate de lo que está sucediendo!
2025-03-27
Autor: Francisco
En las últimas décadas, el dengue ha evolucionado de ser una enfermedad restringida a regiones tropicales a convertirse en una amenaza global seria. Su propagación no solo refleja el aumento del mosquito Aedes, su vector principal, sino también la complejidad clínica y epidemiológica de esta infección. Recientes datos indican que este año el dengue está alcanzando niveles récord en América Latina, un crecimiento alarmante que inquieta a los expertos en salud pública.
"Estamos enfrentando la mayor epidemia de dengue de la historia en América Latina", advierte Alfonso Rodríguez Morales, presidente de la Sociedad Latinoamericana de Medicina del Viajero. En 2024, ya se han documentado más de 13 millones de casos en la región, ¡una cifra que triplica los registros del año anterior! Más de 22,000 de estos casos han sido graves, con más de 8,000 muertes reportadas.
Colombia, donde el dengue es endémico, no ha escapado a esta crisis. En 2023 se notificaron más de 130,000 casos; para 2024, los números superan los 320,000. Aunque algunas áreas como Bogotá o Manizales se consideran libres de transmisión local debido a su altitud, la circulación de los cuatro serotipos del virus dificulta el tratamiento y aumenta el riesgo de formas graves por infecciones secuenciales.
La situación no es menos preocupante en Europa. El mosquito tigre (Aedes albopictus), que puede transmitir el dengue, ya está presente en gran parte de la cuenca mediterránea, incluyendo España. Miquel Martínez, microbiologo del Hospital Clínico de Barcelona, confirma un aumento en los casos autóctonos en el país. En 2023, un brote de ocho casos en Tarragona marcó el inicio de una tendencia al alza, con Francia reportando más de 80 casos y más de 200 en Italia.
"El mosquito llegó para quedarse", enfatiza Martínez, quien subraya la importancia de la vigilancia entomológica y la colaboración entre servicios de salud pública y laboratorios clínicos para controlar brotes locales. Iniciativas como Mosquito Alert, que invitan a la ciudadanía a identificar criaderos de mosquitos, son herramientas fundamentales en zonas no endémicas.
Uno de los mayores retos asociados al dengue es su diagnóstico, especialmente en áreas endémicas donde coexisten otros arbovirus como chikungunya o zika. En Colombia, todos los casos sospechosos de dengue grave requieren confirmación por laboratorio. Sin embargo, las reacciones cruzadas entre flavivirus complican la interpretación de estos resultados, reforzando la necesidad de pruebas serológicas y moleculares adecuadas.
Además, la Organización Mundial de la Salud ha actualizado la clasificación del dengue, abandonando la antigua categoría de "dengue hemorrágico" en 2009 para enfocarse en dengue sin signos de alarma, con signos de alarma y dengue grave. Reconocer síntomas tempranos como dolor abdominal intenso, vómitos persistentes y sangrado es crucial para prevenir complicaciones mortales.
Para combatir el dengue, se requiere un enfoque integral que combine control vectorial, educación comunitaria y vacunación. En América Latina, se están implementando innovaciones como la introducción de la bacteria Wolbachia en poblaciones de mosquitos, un avance que demuestra resultados prometedores en la reducción de la transmisión del virus.
La disponibilidad de nuevas vacunas, tras la controversia con Dengvaxia, también plantea nuevas esperanzas. Estas vacunas, ahora administradas en países como Brasil, Argentina y Colombia, son eficaces contra los serotipos más comunes del virus, representando una poderosa herramienta en la lucha contra el dengue.
El cambio climático se ha identificado como un factor clave en la expansión del dengue. Con el aumento de las temperaturas y el cambio en los patrones de precipitación, áreas antes libres de dengue, como el sur de Estados Unidos y partes de Uruguay, corren el riesgo de convertirse en nuevos focos de infección en un futuro cercano. La movilidad global y la transformación de los hábitats de los mosquitos son también factores que agravan la situación.
En resumen, el dengue no solo es un desafío del presente, sino que ha llegado para quedarse. Los expertos instan a reforzar la vigilancia y adaptar nuestras estrategias para controlar esta amenaza que sigue creciendo. ¡Mantente informado y toma precauciones!