Finanzas

El entorno de Moncloa en Prisa demanda a Oughourlian y se enfrenta a un conflicto sin salida

2025-04-05

Autor: María

La estrategia de Joseph Oughourlian para consolidar su posición como presidente de Prisa no ha logrado poner fin al enfrentamiento con los accionistas cercanos a Moncloa. En un giro inesperado, los inversores afines al gobierno, incluyendo a aquellos vinculados con José Miguel Contreras —quien fue despedido recientemente— han presentado una demanda formal contra Oughourlian.

La acción legal impulsada por los aliados gubernamentales

Global Alconaba, una firma que posee un 7% de acciones en Prisa e implica al empresario Romero-Abreu, quien recientemente vendió 3,8 millones de acciones de la empresa, ha iniciado la demanda contra el presidente. El conflicto surge tras la estrategia de Oughourlian de realizar una ampliación de capital que favoreció a fondos internacionales en detrimento de los accionistas minoritarios, lo que resultó en una dilución de sus participaciones.

Mientras tanto, Oughourlian estaba negociando la refinanciación de la abultada deuda de Prisa, que asciende a 750 millones de euros, con la firma de inversión Pimco. Esta reestructuración incluía una cláusula que garantizaba la continuidad del acuerdo bajo su presidencia, lo que significaba un riesgo adicional para los accionistas que buscan desafiar su autoridad.

¿Qué implican los próximos pasos del proceso?

Expertos en la situación de Prisa indican que Oughourlian todavía tiene cartas en la manga. En caso de que la demanda de Global Alconaba sea admitida a trámite, los demandantes enfrentaría costos legales que rondan entre 2 y 3 millones de euros. Si el juez decidiera avanzar con la demanda, la refinanciación con Pimco podría verse comprometida, obligando a los demandantes a respaldar un riesgo financiero de cientos de millones.

Si el fallo favorable al grupo de Moncloa se concreta, el acuerdo de refinanciación caería, y el grupo demandante tendría que hacerse cargo de aproximadamente 815 millones de euros en deudas.

Por lo tanto, el panorama actual sugiere que Oughourlian sigue teniendo el control de la situación, lo que ha llevado a especulaciones sobre cómo se desarrollarán los acontecimientos. Esta crisis no solo afecta a los involucrados, sino que también plantea interrogantes sobre el futuro de la corporación y su rol en el panorama mediático español.

Un llamado a la acción

La situación en Prisa podría ser un reflejo de las tensiones entre el poder empresarial y político en España. A medida que la crisis avanza, se vuelve evidente que los desafíos financieros y estratégicos que enfrenta Oughourlian y su equipo podrían tener repercusiones significativas para el futuro de los medios de comunicación en el país. ¿Será capaz Oughourlian de mantener su puesto, o la presión por parte de Moncloa y sus aliados resultará en un cambio de liderazgo? Mantente atento a los desarrollos, porque esto apenas comienza.