La presidenta de Junts, Laura Borràs, ha dejado abierta la posibilidad de que su partido apoye una moción de censura contra el presidente Pedro Sánchez, en colaboración con el Partido Popular (PP). Sin embargo, horas después, Junts tuvo que aclarar que 'no defiende' esta opción. Fuentes del partido aseguraron: 'Junts no defiende ninguna moción de censura junto al PP y Vox; Junts negocia con el PSOE'. Esta situación ha generado un torrente de indignación entre los socios de gobierno de los socialistas, ya que tanto Sumar como Comuns han exigido una rectificación urgente por parte de Borràs.

Este enredo comenzó cuando Borràs, durante una entrevista en Telecinco, no fue categórica al descartar un eventual pacto con el PP para derrocar a Sánchez. A pesar de que su intención inicial era reafirmar el compromiso de su partido con los acuerdos de investidura del PSOE, su respuesta ambigua dejó la puerta abierta a interpretaciones. 'No descartamos absolutamente nada. Nuestros votos no pueden darse por hechos en ningún caso, el Gobierno ya está empezando a comprenderlo. Vamos a hacerlos valer para que se cumplan los acuerdos que hemos firmado', declaró Borràs, sembrando aún más confusión entre sus aliados.

Además, una moción de censura en el Congreso de los Diputados implica necesariamente respaldar a un presidente alternativo, en este caso, Alberto Núñez Feijóo del PP, cuya llegada a La Moncloa podría reforzarse de la mano de Vox. Esta estrategia similar fue utilizada por el propio Sánchez para derribar al entonces presidente Mariano Rajoy en 2018. Las palabras de Borràs no solo han causado descontento entre Sumar y Comuns, sino que han despertado preocupaciones acerca de la estabilidad del gobierno actual.

Recientemente, Junts ha enfatizado el valor crucial de sus siete diputados en el Congreso, especialmente desde que se acordó un pacto de investidura con el PSOE. Sin embargo, sus decisiones han complicado la aprobación de varias leyes importantes. Un claro ejemplo fue su rechazo a la regulación del alquiler de temporada, destacando la postura independiente que Junts toma en las negociaciones. Borràs ha afirmado que su partido ha cumplido con su parte del acuerdo al votar a favor de la investidura de Sánchez, y ahora le corresponde al Gobierno central honrar sus compromisos.

'Lo que nos interesa es que se cumplan los acuerdos a los cuales llegamos. Estamos trabajando por Cataluña, no para que España tenga un Gobierno de Pedro Sánchez o un Gobierno del PP', insistió Borràs, dejando claro el enfoque separatista de su partido.

Sin embargo, los socios del PSOE no tardaron en manifestar su rechazo hacia las declaraciones de Borràs. La diputada de Sumar, Aina Vidal, criticó la idea de que Junts pueda ser la 'masa con la que se haga el pastel de la derecha con la ultraderecha' en el contexto de una posible moción de censura. En medios de comunicación, Vidal expresó su preocupación sobre la ambigüedad de Borràs, afirmando que es 'difícil entender que un grupo catalán pueda participar en un gobierno presidido por el PP y acompañado por Vox, pues eso no beneficiaría a Cataluña en absoluto'.

La tensión en el parlamento sigue en aumento y todos los ojos están puestos en Junts. Esto podría ser el inicio de una nueva crisis política en España que podría cambiar el rumbo del país. ¡Estaremos atentos a su evolución!