
El escudo de los dividendos: Tu mejor aliado ante la tormenta bursátil
2025-03-16
Autor: Marta
Invertir en dividendos se vuelve imperativo en un año marcado por la incertidumbre y la volatilidad del mercado. Los aranceles, quiebras geopolíticas y el riesgo económico en EE. UU. son solo algunas de las preocupaciones que asolan a los inversores. Esta estrategia defensiva, según expertos de Allianz Global Investors, presenta un crecimiento notable, con 440.000 millones de euros distribuidos en dividendos por empresas del índice MSCI Europe el año pasado, proyectando un incremento hasta 459.000 millones en 2024, lo cual refleja un aumento del 4%. El sector financiero sigue liderando este crecimiento, aunque se anticipa que sectores como la tecnología de la información y la salud ganen protagonismo.
Las empresas españolas destacan en este escenario, con una rentabilidad por dividendo proyectada del 4,8% para 2024, que tan solo aumentará una décima este año. Esto resulta muy atractivo comparado con el rendimiento del bono español a 10 años, que está en un 3,5%. A nivel global, se repartieron 1,6 billones de euros en dividendos en 2023, evidenciando un aumento del 5,2% en comparación con años anteriores.
El panorama va más allá de Europa; el índice Janus Henderson Global Dividend estima que los dividendos internacionales alcanzarán 1,75 billones de dólares (1,61 billones de euros) en 2024, con un crecimiento del 5,2%. Jane Shoemake, analista de carteras, subraya que el sector tecnológico de EE. UU. comienza a repartir dividendos, desafiando los mitos de que estas empresas evitan devolver capital a los accionistas. Concluye que los dividendos tienden a ser más constantes que las ganancias, ofreciendo menos variabilidad en los ingresos, una conclusión poderosa para los inversores.
Para los que buscan una opción diversificada y segura, los fondos de inversión que invierten en acciones con altos dividendos son una opción excelente. Existen fondos de reparto, que distribuyen dividendos periódicamente, y de acumulación, que reinvierten esos pagos. Fondos como el M&G (Lux) Global Dividend Fund han mostrado rentabilidades anuales del 16,63% en los últimos cinco años, mientras que el Fidelity Global Dividend Fund tiene un rendimiento del 11,89% para el mismo período.
Aun más atractivo es el JSS Sustainable Equity - Dividendo Global P, con una ganancia anualizada en los últimos 5 años del 12,36%. Estos fondos ofrecen buenas opciones defensivas, equilibrando la inversión entre sectores críticos como el farmacéutico y de bienes de consumo. Por otro lado, el Goldman Sachs Europe Equity Income destaca por su enfoque en empresas de dividendos atractivos y sostenibles, logrando un 6,77% de rentabilidad a 5 años.
El fenómeno de los aristócratas del dividendo se ha vuelto popular entre los inversores. Esta clasificación incluye empresas que aumentan sus dividendos año tras año. En el índice S&P 500 Dividend Aristocrats, las empresas como AbbVie y Coca Cola han mantenido este compromiso durante más de 25 años, logrando una rentabilidad anual del 11,75% en los últimos cinco años. Estos aristócratas son ejemplos brillantes de cómo el crecimiento consistente de dividendos puede ofrecer una protección valiosa en tiempos de incertidumbre económica.
Invirtiendo en acciones con altos dividendos, los inversores no solo buscan rentabilidad, sino también una estrategia de protección eficaz frente a fluctuaciones del mercado. A medida que el entorno macroeconómico sigue siendo volátil, los dividendos se consolidan como una fuente de ingresos y seguridad financiera, que muchos están dispuestos a aprovechar en estos tiempos inciertos.