La Confederación Hidrográfica del Júcar ha adjudicado, por más de 22 millones de euros, un nuevo sistema de alerta (SAT) que permitirá mejorar la gestión de crisis en situaciones de emergencia hídrica. Este nuevo instrumento tiene como objetivo optimizar la respuesta ante fenómenos como la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) que devastó partes de Valencia el 29 de octubre.

Expertos han indicado que contar con este sistema durante el último episodio de lluvias intensas podría haber ayudado a mitigar el impacto en las comunidades más afectadas. La falta de un sistema eficiente de alerta contribuyó a que muchas localidades no estuvieran preparadas, provocando daños materiales significativos y la interrupción de servicios básicos.

Además de la adjudicación del SAT, se prevén otras mejoras en la infraestructura de gestión del agua para prevenir futuros desastres. Este cambio responde a las críticas recibidas por la gestión de la crisis anterior y resalta la necesidad urgente de modernizar los mecanismos de alerta y respuesta en la región.

Es un momento crucial para Valencia, ya que se busca no solo recuperar lo perdido, sino también proteger a la población de desastres similares en el futuro. La inversión en infraestructura de alerta muestra un compromiso por parte del Gobierno para asegurar la seguridad y el bienestar de sus ciudadanos.