El huracán Milton ha tocado tierra en Florida, causando una devastación masiva y dejando a más de tres millones de personas sin electricidad. El ciclón, que inicialmente se clasificó como categoría 3, descendió a categoría 1 al impactar la costa sur de Tampa la noche del miércoles, con vientos sostenidos de hasta 120 millas por hora (193 km/h) y lluvias torrenciales que han desbordado la capacidad de drenaje de muchas áreas.

Las autoridades informan que se han registrado al menos dos muertes en una comunidad de jubilados en el condado de St. Lucie, donde los tornados asociados previos al huracán causaron daños catastróficos. Los equipos de emergencia están trabajando incansablemente para realizar operaciones de búsqueda y rescate, ya que se han registrado daños irreparables en muchas viviendas.

El Centro Nacional de Huracanes advierte del alto riesgo de inundaciones en el centro de Florida, donde las lluvias continúan cayendo con intensidad. La situación es particularmente crítica en áreas como Tampa y Orlando, donde se han emitido alertas de inundaciones repentinas con una probabilidad del 70% de ocurrencia, según las proyecciones más recientes.

Los aeropuertos de la región han suspendido operaciones, cancelando más de 1,000 vuelos, lo que ha dejado a muchos viajeros atrapados. Aunque algunos aeropuertos permanecen abiertos, se aconseja a todos los residentes que permanezcan en casa debido a la furia de la tormenta. Walt Disney World, una de las atracciones más importantes de la zona, también ha cerrado sus puertas por precaución.

A medida que el huracán avanza hacia el este del estado, las autoridades han instado a la población a mantenerse alerta y preparada. El presidente de EE.UU., Joe Biden, ha estado en comunicación con los gobernantes de Florida, ofreciendo asistencia federal para las labores de rescate y recuperación.

Este es un recordatorio devastador de la fuerza de la naturaleza. Con más de 19 tornados registrados en las horas previas al impacto del huracán, la llegada de Milton ha generado gran preocupación sobre la seguridad y el bienestar de los que residen en Florida. Las autoridades están en máxima alerta y piden a todos los ciudadanos que tomen todas las medidas de precaución necesarias para protegerse de esta inminente amenaza.