La región oriental de Cuba ha sido golpeada por dos poderosos terremotos que sacudieron la isla este domingo, dejando tras de sí deslizamientos de tierra, daños a viviendas y fallas en el suministro eléctrico. Con magnitudes de 6 y 6.7 grados en la escala de Richter, estos sismos han puesto a la población en alerta máxima, informaron las autoridades locales.

El presidente Miguel Díaz-Canel expresó su preocupación a través de la red social X, instando a los residentes de las provincias de Granma y Santiago de Cuba a 'salir y mantenerse en lugares abiertos' para salvaguardar sus vidas. 'Estamos comenzando a evaluar los daños para iniciar la recuperación. Aunque hemos enfrentado días difíciles, debemos levantarnos', añadió.

El primer temblor se produjo a las 10:50 hora local (15:50 GMT) y el segundo a las 11:49 hora local (16:49 GMT), ambos situados a 32 y 48 kilómetros del municipio Pilón en la provincia de Granma, a una profundidad de 10 kilómetros, según el Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas (Cenais). Además, se han reportado numerosas réplicas de menor magnitud que han sido sentidas por habitantes de diversas localidades, como Guamá y Pilón.

Hasta el momento, las autoridades no han registrado heridos, aunque los daños en la infraestructura están siendo cuantificados. Yudelkis Ortiz, primera secretaria del Partido Comunista en Granma, informó que los movimientos telúricos fueron particularmente intensos en los municipios de Pilón, Niquero y Bartolomé Masó, y llamó a la población a mantener la calma y seguir las recomendaciones de seguridad.

Estos sismos llegan en medio de un contexto climatológico desafiante; las provincias orientales han sido azotadas por intensas lluvias en días recientes y Guantánamo, que sufrió considerablemente debido a la tormenta tropical Óscar hace tres semanas, aún lucha por recuperarse de los efectos devastadores que causaron la muerte de ocho personas y daños significativos a viviendas y la agricultura.

En 2023, Cuba ha enfrentado un total de 7,475 sismos, de los cuales 14 fueron perceptibles para la población, según datos del Cenais. La mayoría de estos movimientos sísmicos han tenido lugar en la falla geológica Oriente, conocida como la zona más activa de la actividad sísmica en el país. Esta región, que abarca desde la República Dominicana hasta México, se encuentra en un área donde convergen varios sistemas de fallas tectónicas, lo que incrementa la probabilidad de terremotos.

La historia sísmica de Cuba incluye eventos significativos como el terremoto de 6.7 grados registrado en 1932, el temblor de 6.9 en 1991 y uno de 7.1 ocurrido en 2020, todos estos en la provincia Granma. Este último evento reitera la necesidad de estar preparados ante la recurrente actividad sísmica en la isla, donde la población debe estar informada y lista para enfrentar cualquier contingencia.