Recientes revelaciones han puesto a Begoña Gómez en el centro de una tormenta judicial. Un análisis exhaustivo de correos electrónicos, revelado por su defensa al juez Juan Carlos Peinado, sugiere que el nuevo material podría tener un efecto boomerang en su defensa, en relación a las acusaciones de apropiación indebida e intrusismo, presentadas por la asociación Hazte Oír.

Un correo fechado el 6 de octubre de 2022, enviado por la Sección de Contratos y Patentes de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), evidenció que existen vínculos que comprometen a la asesora de Moncloa, María Cristina Álvarez. En este correo, se incluía un modelo de “contrato de cesión de derechos” y estaba dirigido no solo a Gómez, sino también a otros destinatarios.

Además, otros correos sacados a la luz muestran la implicación de Begoña en la gestión del máster y la cátedra de Transformación Social Competitiva, que co-dirige. En estos mensajes se discute sobre la elaboración del pliego de contratación del software bajo sospecha, lo que podría complicar su situación legal.

Se sabe que Gómez estuvo involucrada en la organización de un simposio y en la búsqueda de financiamiento para la cátedra de la UCM, un punto que ya había sido mencionado en el sumario del caso. Sin embargo, los nuevos correos aportan una luz adicional sobre sus actividades, sugiriendo una posible falta de transparencia en el manejo del contrato.

Un correo específico, datado el 24 de abril de 2023, destaca la comunicación de la Gerencia de la escuela de Gobierno de la UCM respecto a la licitación. Este correo revela que Begoña debería firmar el pliego de prescripciones técnicas, lo que plantea más interrogantes sobre la legalidad de las acciones realizadas hasta ahora.

Antonio Camacho, abogado de Begoña, sostiene que ella actuó conforme a las indicaciones de la UCM y que nunca buscó apropiarse del software. Sin embargo, el contenido de los correos electrónicos podría contrarrestar esta defensa. Uno de los mensajes menciona que la UCM se compromete a garantizar que los nombres de los autores figuren en todos los documentos, lo que también podría interpretarse como una carga legal adicional para Gómez.

En su reciente comparecencia ante el juez, el abogado solicitó la declaración de varios testigos, incluyendo una interventora que afirmó que la firma de los pliegos se llevó a cabo de acuerdo a las normas de la UCM. Además, se discute la posible apropiación de la marca 'Transformación Social Competitiva', que Begoña propuso como título del máster, añadiendo un nuevo nivel de complejidad al caso.

Este escándalo sigue desarrollándose y las repercusiones podrían ser significativas, no solo para Begoña Gómez, sino también para la imagen del gobierno español y la Universidad Complutense. La trama sigue entrelazándose, y los ciudadanos están expectantes por los próximos giros de este intrigante caso.