En un nuevo capítulo de "Gran Hermano", Edi, Jorge, Laura y Ruvens están disfrutando de un divertido momento al adaptar los villancicos con letras que reflejan su experiencia en la casa. Ruvens improvisa con humor mientras el resto se ríe. Por su parte, en el baño, Maica y Daniela se sumergen en su rutina de skin care, buscando relajarse en medio de la presión del concurso.

Jorge comparte sus sentimientos con Laura, comentando que, sin importar lo que pase, siempre llevarán consigo los recuerdos de sus compañeros. Laura, emocionada, habla sobre su profunda conexión con Manu y la amistad que ha construido con Ruvens. "Esto es lo que más valoro de mi paso por aquí", expresa.

Sin embargo, la atmósfera no es del todo amena. Maica escoge no unirse a sus compañeros para almorzar, citando la incomodidad que siente en la presencia de Edi. "Prefiero no ir a la cocina y comer sola que ser objeto de comentarios", afirma Maica, y Daniela coincide completamente con ella. Mientras tanto, en la cocina, sus compañeros discuten su ausencia, sugiriendo que forma parte del llamado “drama” que están creando.

Berto Gonzalo toma el relevo en la presentación y se entera de que Edi y Jorge han preparado un delicioso pollo con arroz al curry, una mejora notable en el horario del almuerzo que propuso Ruvens. Pero la incomodidad de Maica y Daniela persiste, y deciden mantenerse al margen.

Ruvens y Laura tienen una conversación franca sobre la fobia de Maica. Ruvens, sorprendido, menciona que nunca había escuchado sobre este tema antes. A pesar de esto, siente que la situación está siendo utilizada, lo que provoca aún más tensión en el ambiente.

Al regresar al jardín, Maica confiesa que ya no se siente cómoda. “Siento que no puedo expresar lo que quiero sin temor a provocar un conflicto”, dice angustiada. Por su parte, Daniela también se siente acorralada y manifiesta que cada rincón de la casa trae consigo a alguien con quien no desea compartir espacio.

La atención se centra luego en la comida. Maica, que ha decidido no probar el curry, se encuentra en un dilema al sentir que su decisión podría causar molestias a Adrián, quien se ha esforzado en preparar su especialidad. Consciente de su incomodidad, intenta inventar excusas en lugar de ser directa y explicar su situación. Finalmente, decide que es más sencillo decir que le duele el estómago para evitar conflictos.

Mientras disfrutan de su desayuno, Dani le dice a Maica que se siente mal pensando en aquellos que critican a los demás. Maica intenta cambiar de tema y señala el esfuerzo culinario de Adrián, pero su preocupación por la comida persiste. Ella se siente atrapada entre ser honesta y evitar el drama. A medida que avanza el día, el grupo se enfrenta a nuevos retos, y las tensiones parecen intensificarse, dejando a todos en la casa expectantes ante lo que vendrá. ¿Lograrán Maica y Daniela encontrar su lugar en esta complicada convivencia? La respuesta se revelará en los próximos episodios.