¿Sabías que los volcanes de Hawái, las Islas Canarias e incluso algunos de los secretos ocultos bajo el océano podrían estar conectados de una manera que aún no imaginamos? ¡La sorprendente revelación es que todos ellos podrían tener un origen común en un único magma primordial!

Un estudio reciente ha abierto la puerta a esta fascinante hipótesis, sugiriendo que las cámaras de magma que alimentan estos volcanes pueden derivar de una enorme reserva de roca fundida. Esta idea desafía nuestra visión tradicional de los 'puntos calientes', esas bolsas de magma que pensábamos eran independientes y de orígenes geológicos variados.

Hasta ahora, se creía que cada punto caliente tenía un historial único y diverso, basado en las diferencias en las lavas que emergían de sus cráteres. Sin embargo, este nuevo análisis revela que lo que parecía ser la diversidad en el magma podría ser el resultado de interacciones químicas mientras este asciende a través de la corteza terrestre. En otras palabras, el magma original podría ser el mismo, alterándose al interactuar con distintos elementos durante su viaje hacia la superficie.

La investigación liderada por Matthijs Smit, coautor del estudio, muestra cómo ciertos elementos específicos pueden revelar los efectos químicos que ocurren en el magma antes de erupcionar, confirmando que, en esencia, las lavas de estos puntos calientes comparten una composición inicial similar.

Este descubrimiento sugiere que el manto terrestre es más homogéneo de lo que se pensaba originalmente. Smit establece una analogía interesante: así como la humanidad es diversa a pesar de tener un ancestro común, las diversas lavas que vemos en estos volcanes también podrían descender de un mismo magma primordial.

Estudiar el manto terrestre es un desafío monumental. A pesar de ser uno de los componentes más importantes de nuestro planeta, no podemos observarlo directamente; necesitamos recurrir a métodos indirectos. Utilizamos sismógrafos para analizar cómo se mueven las ondas sísmicas en diferentes entornos y, aunque estudiamos las erupciones volcánicas, es difícil definir qué parte de cada lava proviene del manto y cuál de la corteza.

El estudio completo se puede encontrar en la prestigiosa revista *Nature Geoscience*. Pero eso no es todo: ¡imagina todas las posibilidades que surgen si estos volcanes están verdaderamente interconectados! Podrían revelar más secretos sobre nuestro planeta y su historia geológica que nunca antes habríamos imaginado. Las islas bajo el hielo antártico y más volcanes submarinos también podrían tener su propio papel en este rompecabezas global, ¡mantente alerta para más sorpresas!