CIPER ha revelado un video que documenta la polémica segunda detención del taxi en el que viajaron Manuel Monsalve y la denunciada durante la noche del 22 de septiembre. A pesar de los alegatos del exsubsecretario sobre su supuesta pérdida de memoria antes de salir de un restaurante peruano, el video no muestra signos de desorientación ni inestabilidad por su parte. Por el contrario, la exasesora de Monsalve aparece visiblemente errática, caminando hacia el centro de la calle sin importar el peligro del tráfico. Monsalve, con un paso firme, incluso corre para alcanzarla, tomándola del brazo y guiándola de regreso al vehículo. Poco después, el taxi se dirige a su tercera y última parada: el Hotel Panamericano.

Este video, obtenido por CIPER, revela cómo la pareja había tenido una primera detención del taxi minutos antes, debido a que la mujer se encontraba vomitando. Al continuar su trayecto, se puede observar que la denunciante baja del vehículo de manera inestable, claramente afectada por el consumo de alcohol, moviéndose inconscientemente hacia la calle. En una situación de riesgo, con vehículos acercándose debido a un semáforo en verde, Monsalve se acerca a ella con paso decidido, tomándola del brazo para llevarla de regreso al taxi sin que ella ofrezca resistencia.

Poco después, el taxi parte hacia el destino final, donde ocurrirían los hechos que desembocaron en la denuncia formal por violación y abuso sexual que realizó la exasesora.

CIPER ha tomado medidas para proteger la identidad de la denunciante, al cubrir su rostro en las imágenes, que son distantes y no muestran claramente su expresión. La evidencia visual podría ser crucial para el proceso que se lleva a cabo en el 7º Juzgado de Garantía, especialmente en la segunda jornada de formalización de este martes.

Monsalve ha declarado que no recuerda lo que sucedió después de la cena en el restaurante Ají Seco Místico, testimonio que tanto el presidente Gabriel Boric como la ministra Carolina Tohá han corroborado ante la fiscalía. Sin embargo, el video presenta una narrativa contraria a la confesión de Monsalve, mostrando su comportamiento consciente y estable, lo cual puede influir en el juicio.

Los testimonios del Presidente Boric y la ministra Tohá reiteran la falta de memoria de Monsalve tras consumir dos pisco sour. En su relato, Boric menciona que Monsalve “después del segundo pisco sour ya no se acordaba de nada” hasta que despertó al día siguiente. En cambio, en el video se evidencia que Monsalve mantiene una conducta activa y consciente.

La denunciada ha descrito su estado durante esa noche como uno de completa pérdida de conciencia, afirmando ante la fiscalía: “No recuerdo cómo salí del lugar, ni cómo llegué a su hotel”.

El video también podría servir a la defensa de Monsalve, quienes buscan respaldar la teoría de que no hubo coerción ni uso de la fuerza. El taxista que estuvo involucrado en el incidente también ha declarado, afirmando que en ningún momento presenció forcejeos entre ambos pasajeros y que su rol fue más bien de ayuda y control, considerando la evidente embriaguez de la mujer.

Además, en un video mostrado el primer día de la audiencia, Monsalve aparece en el Hotel Panamericano con una actitud estable, sin signos de desorientación. Se le ve reaccional y enérgico al buscar la llave de su habitación, incluso corriendo por los pasillos.

Este caso se desarrolla bajo una intensa atención mediática y pública, que no solo se centra en el comportamiento de Monsalve, sino en las implicaciones más amplias sobre el abuso de poder y el manejo de casos de agresión sexual en contextos de poder. La pregunta que todos se hacen es: ¿se hará justicia en un escenario donde la percepción pública y la verdad pueden ser distorsionadas por factores externos?