Orson Welles, a la tierna edad de 24 años, logró convencer al guionista Herman J. Mankiewicz de crear un guion que narrara la vida de William Randolph Hearst, el influyente magnate de la prensa estadounidense. Aunque Welles era un novato en la industria cinematográfica, apenas había dirigido un corto a los 19 años y su primer largometraje, titulado 'Too Much Johnson', salió a la luz cuatro años después, solo para desaparecer durante 75 años hasta que se encontró una copia en un cine en Pordenone, Italia, tras ser salvada de un incendio en la casa de Welles en Madrid.

El rodaje de 'Ciudadano Kane' comenzó en julio de 1940 bajo el más absoluto secreto, debido al temor de que Hearst utilizara su poder para bloquear el proyecto, después de que hubiera tenido acceso al guion por un descuido de Mankiewicz. Aunque el poderoso empresario no pudo impedir que su vida se plasmara en la pantalla, intentó frenar la película con todas sus fuerzas, incluso presionando a RKO para que destruyera el material rodado. Se dice que incluso la Metro-Goldwyn-Mayer consideró comprar la película solo para eliminarla, siguiendo las ordenes de Hearst.

A pesar de estos intentos de censura, 'Ciudadano Kane' fue lanzada en 1941 y recibió críticas mixtas en su estreno. Sin embargo, con el paso del tiempo, se ha convertido en un clásico aclamado por la crítica, considerado por muchos como la mejor película de todos los tiempos, gracias a su innovadora narrativa y a una dirección audaz que revolucionó la forma de hacer cine.

Hoy, 'Ciudadano Kane' es objeto de estudio en escuelas de cine y se analiza por su complejidad temática y técnica. Su historia de poder, corrupción y pérdida ha dejado una huella imborrable en la cultura pop y cinematográfica, demostrando que a pesar de su fracaso inicial, ha sabido trascender el tiempo y convertirse en un referente esencial para el séptimo arte.