En un giro inesperado de los acontecimientos, el fiscal especial Jack Smith ha retirado las acusaciones federales que pesaban sobre Donald Trump, relacionadas con el intento de derrocar los resultados de las elecciones de 2020 que llevaron al asalto del Capitolio, así como el caso de la retención de documentos clasificados en su pospresidencia en Mar-a-Lago. La jueza federal Tanya S. Chutkan ha decidido cerrar el caso por injerencia electoral, dejando a muchos sorprendidos ante este desenlace.

La decisión del fiscal, quien ha enfrentado amenazas de Trump regresando al poder, era anticipada dado el principio del Departamento de Justicia que impide procesar a un presidente en funciones. Smith solicitó a la jueza que desestimara las acusaciones sin perjuicio, lo que implica que podrían reabrirse en el futuro si Trump deja la Casa Blanca tras un segundo mandato.

Este lunes, el fiscal también presentó una moción para excluir a Trump de la apelación en el caso de los documentos clasificados en Florida, que ha sido objeto de un apelación por parte de Smith después de que la juez Aileen Cannon desestimara parte de la acusación en verano.

Ambos casos han estado envolviendo a Trump en un manto de incertidumbre, pero ahora, con los casos federales cerrados, se abren nuevos escenarios en el ámbito judicial. Según informes, estas investigaciones nunca llegaron a ver un juicio, lo que ha generado un debate sobre la imparcialidad del sistema judicial en el contexto político actual.

Vale la pena señalar que Trump enfrenta otros desafíos legales, como el caso en Nueva York relacionado con los pagos a la actriz pornográfica Stormy Daniels, y la investigación en Georgia por tratar de manipular los resultados electorales en 2020. A pesar de que las pruebas en estos casos son contundentes, el giro reciente en el caso del Capitolio sugiere que la resistencia de Trump en el ámbito judicial puede ser más fuerte de lo que se pensaba.

Trump, en un comunicado a través de su director de comunicaciones, celebró la decisión como una victoria del Estado de derecho y reafirmó su compromiso de continuar luchando, prometiendo llevar a cabo acciones legales contra todos aquellos que, según él, han intentado perjudicarlo durante su carrera.

La situación política y judicial en EE.UU. sigue evolucionando rápidamente, y muchos se preguntan qué nuevas sorpresas traerá el futuro en la tormentosa carrera de Trump por recuperar la Casa Blanca y las implicaciones de estos casos en el clima político del país. ¡Este es solo el comienzo de una nueva etapa en la vida del expresidente!