Salud

¡Increíble! La lactancia materna provoca un aumento inesperado de consultas por frenillo lingual en bebés

2025-03-24

Autor: Carmen

En los últimos años, las consultas para evaluar si los recién nacidos tienen el frenillo lingual corto han crecido de manera alarmante. Este fenómeno ha sido observado por matronas, odontopediatras, pediatras y cirujanos pediátricos, quienes creen que esta tendencia está relacionada con la creciente popularidad de la lactancia materna. Las familias están más informadas sobre los beneficios que ofrece la lactancia tanto para el bebé como para la madre, lo que ha llevado a un interés creciente en establecerla. Sin embargo, este entusiasmo puede verse complicado por un trastorno conocido como anquiloglosia, que limita el movimiento de la lengua. Así, cuando un niño tiene dificultades para mamar, los padres tienden a explorar esta opción.

Según la doctora Margarita Montero Sánchez, responsable de Cirugía Pediátrica en el Hospital Álvaro Cunqueiro, "hemos notado un aumento en la demanda de consultas por este problema en recién nacidos en los últimos años". Aclara que si bien la revisión del frenillo lingual siempre ha sido parte de la evaluación, últimamente, más del 10% de sus consultas se debe a este motivo.

En 2024, se llevaron a cabo 80 secciones quirúrgicas en su hospital solo por este diagnóstico. Montero indica que en su consulta diaria de cirugía pediátrica tratan entre 25 y 30 pacientes, y al menos dos de ellos llegan para evaluar el frenillo lingual corto. El diagnóstico se realiza mediante una exploración que permite determinar si el frenillo es normal o si presenta características patológicas que dificultan la movilidad de la lengua.

"El pediatra ya puede realizar la sección en el momento del nacimiento si lo considera necesario", señala Montero, quien también destaca que algunos pacientes llegan derivados de otros profesionales de la salud. La cirugía puede ser sencilla si se trata de bebés que aún no tienen dientes, mientras que otros casos requieren intervención quirúrgica en quirófano con anestesia y supervisión postoperatoria.

El aumento en la detección de casos de anquiloglosia se puede atribuir también a una mayor conciencia sobre los síntomas que causan problemas en la alimentación y el habla. La pediatra Lucía Juncal Gallego, consultora internacional en lactancia, afirma que se estima que entre el 10% y el 30% de los recién nacidos pueden tener este problema. Esto puede conllevar a dificultades de alimentación, regurgitaciones, problemas respiratorios, y, años después, dificultades en el habla y el sueño.

"Estamos comenzando a investigar y documentar estos casos", añade Gallego. Esto se debe a un cambio cultural en la percepción de la lactancia, donde las madres están más capacitadas y buscan identificar las causas de los problemas de lactancia. La experta recalca que el frenillo lingual es solo una de las muchas causas que pueden afectar la alimentación y el desarrollo del bebé.

En este contexto, la odontopediatra Genoveva Gómez, que también realiza cirugías de frenillo lingual en la ciudad, observa cómo la preocupación por la anquiloglosia ha aumentado notablemente. "Antes, si había problemas en la lactancia, nadie se preocupaba por descubrir la razón", comenta. En la actualidad, está claro que es muy raro que una mujer no pueda amamantar, y los profesionales están atentos a los síntomas que indican la necesidad de una evaluación más profunda.