La primera novillada de la temporada en la plaza de Las Ventas ha dejado a todos los espectadores con la adrenalina a flor de piel. Este evento, que marco el inicio de la temporada taurina, se ha convertido en un espectáculo imperdible para los amantes de la tauromaquia.

Sexto novillo:

El último novillo que cerró la jornada mostró una silueta impresionante, pero lamentablemente careció de fuerza. El novillero Emiliano Osornio intentó torear con firmeza, pero el animal no dio más de sí, afectando la calidad de la faena. A pesar de algunos destellos de buen toreo en la mano izquierda, el utrero fue silenciado después de un pinchazo y una estocada en la parte alta.

Quinto novillo:

El quinto contendiente fue un toro rabioso y difícil de manejar, que hizo sudar a Mariscal Ruiz. Comenzó su faena de rodillas, mostrando gran valentía y exposición. En distancias cortas, logró provocarle embestidas al novillo, arriesgándose a recibir una cornada. Al final, recibió una ovación aunque tuvo que regresar a la enfermería por una herida en la mano derecha.

Cuarto novillo:

Tras su paso por la enfermería, Diego Bastos salió decidido a enfrentar al cuarto novillo. Este, demostrando buena calidad, permitió a Bastos disfrutar de algunos buenos momentos en la muleta. Aunque dejó muestras de buen toreo junto a las tablas, no logró concretar un término favorable en la lidia final, y tras ejecutar una estocada, se llevó un silencio de la plaza.

Tercer novillo:

Con un novillo complicado del hierro de Fuente Ymbro, Osornio se presentó en Madrid con un toreo firme. Aunque el novillo mostraba signos de rajarse, el mexicano logró controlarlo y realizó una actuación que generó aplausos. Sin embargo, el animal no mejoró su actitud durante la muleta, y la actuación finalizó con una buena estocada que fue premiada con una ovación.

Segundo novillo:

Este novillo fue serio y complicado, presentando dificultades en ambas manos. Mariscal Ruiz mantuvo una postura firme desde el inicio, realizando una faena que tuvo momentos de calidad, especialmente en la mano derecha. En varias ocasiones, se vivieron momentos de tensión, pero el joven torero se mantuvo en pie. Finalmente, se le administró una estocada en el segundo intento, y aunque pasó a la enfermería, lo hizo por su propio pie, dejando una buena impresión entre el público.

Los aficionados vibraron durante toda la novillada, que ha dejado el ambiente pletórico para las próximas corridas en Las Ventas. ¡No te pierdas la próxima fecha, donde los valientes novilleros seguirán desafiando a estos imponentes toros!