Este lunes, la calma de las Tres Mil Viviendas en Sevilla se vio interrumpida por un tiroteo alarmante que ha dejado a los residentes en estado de shock. A pesar de que algunos disparos fueron realizados al aire, indicando quizás una táctica disuasoria, los impactos en los edificios residenciales evidencian que la situación es extremadamente grave. La Policía ha iniciado una investigación centrada en la implicación de dos peligrosos clanes de la droga que dominan el Polígono Sur: los Caracoleños y los Naranjeros.

Los Caracoleños, conocidos por su historia de violencia y control en el área, continúan desatando episodios de enfrentamientos que aterran a la comunidad. Los residentes han afirmado que desde la llegada de estos clanes, «los problemas han aumentado considerablemente», y varios de ellos han recibido amenazas por compartir imágenes y vídeos del enfrentamiento en las redes sociales.

La creciente presencia de plantaciones de marihuana en la zona es un factor clave detrás de los frecuentes cortes de luz que padecen los vecinos, debido a las conexiones eléctricas ilegales. Este conflicto entre clanes, en vez de mediar por un reparto equitativo del área, ha desencadenado una lucha violenta por el control total de sus operaciones.

Frente a esta situación caótica, el comisionado del Polígono Sur, Jaime Bretón, ha llamado a las autoridades a realizar «controles aleatorios» en las propiedades y vehículos de los clanes involucrados, insistiendo en la necesidad de recuperar la seguridad en la comunidad. Es urgente que las administraciones actúen, ya que la vida de muchas familias está en peligro debido a la violencia relacionada con el narcotráfico. En las últimas semanas, los residentes han experimentado un aumento notable en la inseguridad, lo que ha generado un ambiente de miedo y desconfianza en su propio hogar. ¡La comunidad clama por ayuda antes de que sea demasiado tarde!