Después de una intensa experiencia que lo llevó al borde del altar y una inesperada huida, Juan Ortega, el joven torero de 34 años, ha encontrado una nueva razón para sonreír: el amor. Desde finales de mayo, se ha dejado cautivar por Isabel Lozano, una periodista con profundas raíces en el mundo taurino.

Isabel es nieta del famoso torero y empresario Pablo Lozano, y su padre, Fernando Lozano, también es un reconocido torero y ganadero. Desde agosto, cuando se hizo pública su relación, Isabel ha preferido mantenerse en un perfil bajo, cuidando sus redes sociales y evitando cualquier exposición mediática. Sin embargo, la revista Semana ha sido la primera en documentar su relación, mostrando imágenes de la pareja disfrutando de un romántico paseo por Sevilla.

Durante su visita, la pareja optó por una ruta con tintes espirituales, paseando por los alrededores de la Maestranza y visitando la capilla del Carmen, así como la parroquia de Santa Ana, la más antigua de la ciudad. Aunque las fotos no capturaron un beso, sí revelaron momentos de ternura y complicidad entre los dos. Su escapada culminó con una noche en el exclusivo hotel Colón, lo que sugiere que su conexión se va fortaleciendo día a día.

La primera aparición pública de Juan e Isabel ocurrió el pasado 15 de mayo, cuando Fernando, padre de Juan, compartió una imagen durante una visita a la ganadería Alcurracén, donde Isabel también tiene un papel destacado. Esta ganadería es propiedad de la familia Lozano y es famosa dentro del mundo del toreo español.

Isabel se presenta en sus redes como "multifacética", un título que refleja su multifacético involucramiento en la ganadería, demostrando que no solo es una figura pública, sino también una trabajadora incansable en el campo. De hecho, se espera que en el futuro asuma el legado familiar, continuando con la tradición taurina que ha marcado la vida de su familia.

Mientras la relación entre Juan y Isabel continúa creciendo, muchos se preguntan si esta nueva historia de amor será capaz de redimir los momentos difíciles que vivió el torero en el pasado. ¿Está Juan Ortega finalmente listo para dejar atrás sus miedos y aceptar el amor verdadero? La respuesta parece estar en el aire, envuelta en la magia de Sevilla y la conexión especial que comparten juntos.