El afamado escritor Javier Cercas ha dado un poderoso discurso en su ingreso a la Real Academia Española, defendiendo la literatura como una forma de rebeldía ante el poder. En su discurso titulado 'Malentendidos de la modernidad. Un manifiesto', compartió su visión sobre la importancia de la literatura no solo como un medio de conocimiento, sino también como una fuente de placer comparable al sexo.

Cercas, autor de la icónica obra 'Soldados de Salamina', abordó lo que considera una "telaraña de malentendidos" en el ámbito literario actual. Enumeró cuatro equívocos que han persistido a lo largo del tiempo, relacionados con la percepción del escritor: la imagen del autor encerrado en una torre de marfil, la glorificación del arte como algo exclusivo, la idea de que la buena literatura debe ser mínima, y la noción errónea de que el arte es inútil.

"La auténtica literatura está compuesta por palabras en rebeldía, y por eso representa un peligro para cualquier forma de poder", afirmó Cercas, cuestionando si realmente existe algo más "útil" que esta rebeldía.

Señaló la larga historia de hostigamiento que la literatura ha sufrido desde Platón, mencionando cómo "tirano, inquisidores y comisarios políticos han intentado silenciar la voz de los escritores a lo largo de la historia". La defensa del arte como un bien social ha sido, según él, fundamental en la lucha contra el totalitarismo. Recordó el célebre dogma de Oscar Wilde, quien defendió la idea de que el arte no necesita justificar su existencia, un planteamiento que, en sus palabras, ha sido ignorado en el mundo literario contemporáneo.

La visibilidad de obras populares y comprometidas ha sido tema recurrente en su discurso. Cercas se negó a aceptar que un libro sea considerado bueno solo por su éxito comercial, mencionando a grandes autores desde Shakespeare y Cervantes hasta contemporáneos como Vargas Llosa. Asimismo, repudió la noción de que la verdadera inmortalidad del escritor radica en la fama, defendiendo que "el anonimato puede ser el crisol de la auténtica literatura".

El autor también enfatizó la importancia del lector, afirmando que "una novela es una partitura y el lector es quien la interpreta", subrayando que un libro sin lectores es "letra muerta". Este enfoque reivindica el papel activo que juega el lector en la apreciación literaria.

Por último, destacó a sus predecesores y mencionó a Javier Marías, quien dejó una huella imborrable en la literatura española tras su fallecimiento en 2022. Al tomar posesión de la silla R, Cercas instó a su audiencia a vivir la "aventura de vivir una vida acorde con nuestros sueños y deseos", tomando como ejemplo a personajes icónicos como Don Quijote y Madame Bovary.

Cercas nos recuerda que la literatura tiene el poder de cambiar vidas y desafiar sistemas, y su mensaje resuena en un momento en que el mundo parece más dividido que nunca. ¡No te pierdas sus próximas obras y reflexiones sobre el impacto del arte en la sociedad!