Salud

¡Revelado! Cómo el ejercicio intenso activa la autofagia celular y protege tus músculos

2024-10-07

Autor: Carmen

Investigadores del Instituto Universitario de Investigaciones Biomédicas y Sanitarias (IUIBS) han hecho un descubrimiento sorprendente sobre la autofagia celular, un crucial mecanismo de reciclaje celular que permite la eliminación de orgánulos y moléculas dañadas. Su trabajo revela que el ejercicio intenso no solo activa este proceso, sino que también es fundamental para la adaptación del músculo esquelético al ejercicio y para mantener su funcionalidad.

El equipo de investigadores, compuesto por expertos como Miriam Martínez Cantón, Víctor Galván Álvarez y Ángel Gallego Selles, entre otros, ha contado con el apoyo del Ministerio de Economía y Competitividad. El estudio se centró en cómo la autofagia se activa tras realizar ejercicio en condiciones controladas: en una simulación de hipoxia (como si estuvieran a 5.500 metros de altitud) y en condiciones normales de oxígeno.

En la investigación, once jóvenes varones fueron sometidos a un protocolo de ejercicio intenso, seguido de un breve episodio de isquemia en una pierna, mientras que la otra mantuvo circulación normal. Las biopsias de músculo vasto lateral se tomaron a los 10 y 60 segundos post-ejercicio para estudiar la recuperación celular en estas dos condiciones tan diferentes.

Los resultados mostraron una activación temprana de proteínas asociadas con la autofagia, como la MYTHO, descubierta recientemente en roedores y que parece ser sensible al ejercicio intenso en humanos. Este descubrimiento es fascinante, pues sugiere que la respuesta del cuerpo a un estrés físico significativo se traduce en un proceso de reparación celular que podría ser clave para mejorar la salud muscular a largo plazo.

Lo más intrigante es que la activación de la autofagia ocurría rápidamente, pero se revertía al poco tiempo en la pierna que no estaba sujeta a isquemia, evidenciando que un retraso en la recolección de muestras podría alterar drásticamente los resultados. Esto abre la puerta a nuevas consideraciones para futuros estudios relacionados con el ejercicio físico y sus efectos celulares.

Además, los investigadores apuntan que el aumento de las especies reactivas de oxígeno (ROS) durante el ejercicio puede ser un estimulado esencial para la activación de la autofagia. Este proceso protege el músculo de posibles daños que podrían comprometer su capacidad de adaptación y funcionamiento.

El estudio no solo se limita a la salud muscular. Se ha demostrado que un mal funcionamiento de la autofagia está correlacionado con enfermedades neurodegenerativas. Investigaciones previas en roedores también sugieren que el ejercicio físico potencia la autofagia y promueve la formación de nuevas neuronas en el cerebro.

Los científicos advierten que, aunque estos efectos se han demostrado en el músculo esquelético, aún queda por investigar si este mecanismo se aplica a otros tipos de tejidos. Este estudio brinda una valiosa comprensión de los mecanismos moleculares detrás de los beneficios del ejercicio prolongando la calidad de vida y la salud, especialmente en poblaciones envejecidas.

Conocer estrategias que puedan aumentar o mantener la autofagia podría tener un gran impacto en la prevención y tratamiento de diversas patologías asociadas al envejecimiento y enfermedades crónicas. ¡El ejercicio no solo es bueno para tu cuerpo, sino que también podría ser tu mejor aliado en la batalla contra el envejecimiento!