¡Descubre por qué ver videos en tu celular puede intensificar tu aburrimiento!
2024-11-21
Autor: Mateo
¿Te has encontrado saltando de un video a otro en YouTube, deslizando por Instagram o TikTok, o empezando una serie en Netflix que luego dejas a medias? Si esto te suena familiar, no estás solo. Este comportamiento de deslizamiento constante entre contenidos digitales se ha vuelto habitual en nuestra vida diaria. Aunque lo hacemos con la intención de distraernos y combatir el aburrimiento, es un mito que este tipo de actividad sea una solución efectiva.
Estamos inmersos en una era donde el entretenimiento digital es prácticamente ilimitado, pero la frustrante realidad es que el aburrimiento persiste o incluso se intensifica. De hecho, investigaciones recientes han mostrado un aumento significativo del aburrimiento entre los jóvenes en las últimas dos décadas, creando la pregunta: ¿qué está pasando?
El fenómeno del bucle atencional
El aburrimiento puede ser descrito como una experiencia frustrante. Anhelamos una actividad que nos sumerja y mantenga nuestra atención, pero a menudo no encontramos esa conexión. La psicología sugiere que esta experiencia está vinculada a un bucle atencional: todos tenemos un nivel ideal de atención que deseamos alcanzar al involucrarnos en una actividad, pero rara vez logramos ese ideal. La distancia provocada entre nuestro estado actual y el deseado alimenta nuestro aburrimiento.
La trampa del móvil: el nuevo opiáceo del siglo XXI
El deseo de escapar de ese estado de aburrimiento frecuentemente nos lleva a recurrir a nuestras pantallas. El teléfono móvil se ha convertido en una herramienta accesible para huir del tedio, pero la ciencia sugiere que este remedio es engañoso. Un estudio revela que estar constantemente en el móvil, especialmente durante momentos de tedio o fatiga, podría incrementar en realidad esa sensación de aburrimiento y, para colmo, disminuir el placer de las interacciones en la vida real.
Sorprendentemente, un teléfono en la mesa durante una reunión se ha relacionado con una disminución de la calidad de esa interacción social. En un mundo donde los móviles prometen conectar a las personas, ¿cómo es que en muchos casos nos desconectan aún más?
Digital switching: el culpable de nuestra insatisfacción
La clave de este descontento no es el teléfono en sí, sino cómo lo utilizamos. El fenómeno del “digital switching” —la compulsión a cambiar de un contenido a otro— se ha vuelto bastante común y parece ser un contribuyente crucial del aburrimiento. En una serie de experimentos, se encontró que los participantes que podían saltar de video en video mostraban más aburrimiento y menor satisfacción comparados con aquellos que estaban limitados a ver un solo video.
Los resultados sugieren que, cuando elegimos cambiar contenidos, estamos reconociendo que nuestra atención no está absolutamente cautivada. Al tener el océano de opciones a nuestra disposición, creemos que el próximo video podría ofrecer lo que buscamos. Sin embargo, este ciclo de salto solo refuerza nuestra frustración: cada cambio nos deja a la expectativa de algo mejor que nunca llega, incrementando así el sentimiento de vacío.
En contraste, cuando nos limitamos a una única opción, nuestra atención se vuelve más profunda y significativa, similar a la experiencia envolvente de ver una película en el cine. Resulta claro que el uso irreflexivo de nuestros dispositivos móviles, lejos de ser una solución contra el aburrimiento, puede agudizar nuestra insatisfacción.
En vista de esto, es fundamental repensar nuestra relación con la tecnología. Considerar alternativas que prioricen la atención consciente y la inmersión puede cambiar radicalmente cómo experimentamos el entretenimiento digital. La clave está en encontrar un equilibrio y recordar que, aunque nuestros móviles son herramientas poderosas, su mal uso puede resultar en un círculo vicioso de aburrimiento y descontento.