Mundo

¡Escándalo en Venezuela! Gobierno desautoriza a fiscal que vinculó a Lula con la CIA

2024-10-15

Autor: Sofía

El Gobierno de Venezuela ha manifestado este martes su "respeto absoluto" hacia el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, poco después de que el fiscal general, Tarek William Saab, lo calificara de "vocero" de una izquierda latinoamericana supuestamente "captada" por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos.

En un comunicado emitido por el Ministerio de Exteriores, se enfatiza: "Expresamos a la opinión pública nacional e internacional, especialmente al pueblo y Gobierno de Brasil, que las declaraciones recientes del fiscal general sobre el presidente Lula son opiniones personales y no reflejan la postura del Ejecutivo nacional".

Saab, durante una entrevista en el canal Globovisión, hizo afirmaciones sorprendentes, indicando que el presidente chileno, Gabriel Boric, es un "agente de la CIA" y que Lula habría sido "captado" de manera similar. Estas declaraciones han generado un fuerte revuelo tanto en Venezuela como en el extranjero.

El Gobierno venezolano, al desmarcarse de las palabras de Saab, reafirmó su compromiso con "la construcción de vínculos de hermandad y solidaridad" con Brasil. El comunicado también destacó el "respeto absoluto a la trayectoria y liderazgo" de Lula, lo que puede ser visto como un intento de mantener relaciones diplomáticas estables en medio del creciente conflicto político.

Por su parte, Tarek William Saab trató de aclarar que sus comentarios eran a título personal y no podían atribuirse a la posición oficial de Nicolás Maduro. Sin embargo, muchos observadores se preguntan si esta aclaración es suficiente para mitigar las consecuencias de sus contundentes afirmaciones.

La tensión aumenta a medida que se revelan estos mensajes contradictorios dentro del Gobierno venezolano, y los medios internacionales han comenzado a investigar el impacto de estas declaraciones en las relaciones entre ambos países. Con el contexto actual en América Latina, las palabras de Saab son parte de un creciente clima de desconfianza y polarización en la política regional.