El regreso del programa de farándula Primer Plano ha desatado una ola de reacciones en redes sociales. Este icónico show, que estuvo fuera del aire durante seis años, volvió en un horario estelar este domingo, prometiendo sorprender a sus seguidores.

Entre las presentadoras del panel se encuentran Cony Capelli, Pamela Jiles y Patricia Maldonado, quienes arrancaron con esta nueva temporada cargada de contenido discutible.

El enfoque inicial del programa fue el caso del exfutbolista Jorge Valdivia, quien actualmente se encuentra en prisión preventiva. Para ilustrar la situación del deportista, la producción utilizó impactantes imágenes generadas por inteligencia artificial, mostrando a Valdivia tras las rejas, junto a representaciones gráficas de Daniela Aránguiz y Maite Orsini.

Los espectadores quedaron atónitos con la atención al detalle en la escenografía, que incluyó una réplica de la celda donde Valdivia está recluido. Sin embargo, esta propuesta no estuvo exenta de críticas, ya que muchos usuarios en la red social X cuestionaron la ética de tratar un caso tan serio como un espectáculo de entretenimiento. Comentarios como "Farandulizar un caso de delito sexual es de muy mal gusto" o "han transformado un caso de violación en farándula" reflejaron el descontento del público.

Esta controversia plantea una importante discusión sobre los límites en la televisión y la responsabilidad de los medios al tratar temas delicados. Algunos analistas apuntan a que el programa podría estar contribuyendo a una normalización del sensacionalismo en la cobertura de casos judiciales, mientras que otros creen que simplemente están reflejando la fascinación del público por la farándula.

El regreso de Primer Plano no sólo marca el retorno de un clásico de la televisión chilena, sino que también abre un debate sobre la ética del entretenimiento en competencia con la sensibilidad de los temas que aborda. Sin duda, la audiencia estará pendiente de cómo el programa maneja estos desafíos en los próximos episodios.