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La Sombra de la Riqueza: ¿Dónde Está la Fortuna Oculta de Bashar al-Assad?

2024-12-16

Autor: Lucas

La caída del régimen de Bashar al-Assad en Siria ha desatado una búsqueda frenética de los miles de millones de dólares que su familia acumuló durante más de 50 años de poder. El derrocamiento de Assad, ocurrido el 8 de diciembre, llevó a su fuga hacia Rusia, donde se encuentra asilado junto a su familia.

Desde que su padre, Hafez al-Assad, tomó el control en los años 70, el clan Assad ha tejido una extensa red de inversiones y negocios que abarcan el globo. Se estima que sus inversiones incluyen propiedades de lujo en Rusia, hoteles boutique en Viena y un extravagantísimo jet privado en Dubái. La revelación de estas riquezas ha sido corroborada por el Wall Street Journal, citando fuentes de organizaciones que han investigado minuciosamente su situación financiera.

Andrew Tabler, un expersonal de la Casa Blanca y experto en sanciones, ha señalado que se espera una intensa búsqueda internacional de los activos del régimen. Él añade que la familia Assad utilizó a parientes y allegados para ocultar sus grandes riquezas en el extranjero, lo que les permitió diversificar aún más sus ingresos.

A lo largo de 24 años, Bashar al-Assad continuó el legado de su padre, pero la fortuna de la familia ha crecido exponencialmente en medio de la devastadora guerra civil que asoló al país desde 2011. Un informe del Departamento de Estado de EE. UU. en 2022 estimó que los activos y empresas asociados con los Assad podrían alcanzar cifras astronómicas entre 1.000 y 12.000 millones de dólares, obtenidos principalmente a través de monopolios estatales y el tráfico de medicamentos, como el captagon.

Las ganancias se reinvirtieron en jurisdicciones que escapan al control internacional, lo que complica aún más la recuperación de esos fondos. Mientras tanto, casi el 70% de la población siria vive en condiciones de pobreza extrema, según datos del Banco Mundial, lo que contrasta notablemente con la opulencia de la familia Assad.

Toby Cadman, abogado de derechos humanos, describe a la familia como 'expertos en violencia criminal y delitos financieros'. Este tipo de acaparamiento de riqueza ha sido tema de investigación y disgusto a nivel internacional. Además, Asma al-Assad, la esposa de Bashar, también posee un trasfondo financiero significativo, siendo exbanquera de JPMorgan en el Reino Unido.

Si bien investigadores y funcionarios han intentado seguir el rastro de los activos de la familia Assad, la experiencia pasada con otros regímenes, como los de Saddam Hussein y Muammar el Gadafi, ha demostrado ser complicada. Autoridades libias informaron que de los 54.000 millones de dólares en activos del antiguo régimen, muy poco se ha recuperado, a pesar de incautaciones de propiedades valiosas.

En años recientes, equipos legales han logrado congelar algunos activos relacionados con la fortuna Assad, incluyendo en 2019 una orden judicial en París que bloqueó 90 millones de euros (aproximadamente 95 millones de dólares) en propiedades pertenecientes a Rifaat al-Assad, tío de Bashar.

El futuro de la fortuna Assad aún es incierto, pero la búsqueda de sus activos ya ha comenzado, generando especulaciones sobre el destino final de este dinero y el impacto que tendrá en la lucha contra la corrupción y la justicia en Siria.