El antiguo estereotipo de la "solterona" que sugiere que las mujeres solteras son infelices y solitarias, rodeadas solo de gatos, ha quedado en el olvido. Un reciente estudio de Psicología de la Universidad de Toronto arroja luz sobre una realidad sorprendente: las mujeres solteras son más felices que los hombres solteros. Este hallazgo se basa en diversos trabajos anteriores y sugiere que los hombres podrían tener más que perder en una relación romántica tradicional.

La investigadora principal, Elaine Hoan, destacó que este es el primer estudio en profundidad sobre cómo las diferencias de género afectan el bienestar en la soltería. "A partir de este estudio, podemos entender por qué las mujeres solteras parecen tener una vida más plena que los hombres solteros", comentó.

En la investigación, que analizó a casi 6000 adultos, se examinaron cuatro indicadores clave: satisfacción con el estado civil, satisfacción general con la vida, satisfacción sexual y deseo de estar en una relación. Es importante señalar que, debido al tamaño de la muestra, el estudio se centró en personas que se identificaban como hombres o mujeres, dejando de lado a las personas no binarias.

Los resultados son contundentes: las mujeres se muestran más satisfechas con su soltería, tienen una mejor calidad de vida y disfrutan más de su vida sexual, además de mostrar menos interés por establecer una relación. También afirmaron sentirse más satisfechas cuando viajan solas.

Expectativas de género en juego

Hoan señala que estos hallazgos se alinean con investigaciones anteriores que indican que los hombres suelen temer más la soltería y enfrentan grandes presiones para cumplir con expectativas de masculinidad que a menudo no les benefician. "Se cree que ser un 'verdadero hombre' es sinónimo de tener éxito en el amor. Sin embargo, muchos hombres luchan para encontrar pareja, lo que afecta directamente su autoestima y satisfacción sexual", apunta.

Los hombres solteros mayores, por cierto, son más felices que sus contrapartes más jóvenes, lo que se correlaciona con estudios anteriores que sugieren que la felicidad en la soltería aumenta a partir de los 40 años.

Incels y la infelicidad masculina

Este estudio también abre un diálogo sobre los incels, un grupo de hombres que expresan resentimiento hacia las mujeres debido a su propia soltería. Si bien a menudo se consideran una subcultura misógina, el estudio sugiere que esta infelicidad puede llevar a algunos hombres a buscar refugio en estos grupos extremos.

¿Por qué es mejor la soltería para las mujeres?

Aunque el estudio no profundiza en los motivos específicos del mayor bienestar de las mujeres solteras, se mencionan ciertos factores. Históricamente, las mujeres casadas a menudo asumen una carga desigual de responsabilidades domésticas y emocionales, lo cual puede afectar su felicidad. La psicóloga Elena Dapra, quien no participó en este trabajo, explica: "Las mujeres casadas suelen enfrentar una gran carga emocional que puede disminuir su satisfacción general. Además, su placer sexual puede ser menospreciado debido a la carga de trabajo desigual dentro del hogar."

Por el contrario, las mujeres solteras disfrutan de un mayor control sobre su tiempo y decisiones, sin tener que ajustar su vida a las necesidades de una pareja. Esta autonomía puede ofrecerles una sensación de bienestar superior. Además, suelen mantener redes sociales más amplias y variadas, lo que también contribuye a su felicidad.

La evolución del concepto de matrimonio

El estudio también subraya que las expectativas sobre las mujeres han cambiado. Hoy en día, muchas sienten que no necesitan un matrimonio para validar su felicidad o estatus social, lo que les permite perseguir sus propios objetivos personales y profesionales. A menudo se ha observado que los hombres tienden a beneficiarse emocionalmente del matrimonio, mientras que las mujeres, especialmente en matrimonios disfuncionales, pueden sufrir un efecto contrario.

Con todos estos factores en juego, las presiones sociales que enfrentan las mujeres solteras para encontrar pareja son significativas. A menudo sienten que deben conformarse a un ideal que no desean, lo que puede complicar su bienestar emocional.

En resumen, este estudio no solo desafía las nociones preconcebidas sobre la soltería, sino que también ofrece un nuevo enfoque sobre cómo el contexto de género influye en la felicidad individual. Las mujeres solteras están reclamando su derecho a ser felices y a vivir plenas vidas, lejos de los estigmas pasados.