La transición hacia la electromovilidad en España enfrenta serios desafíos, siendo uno de los más críticos la falta de una infraestructura de carga adecuada. Si a esto le sumamos que los cargadores públicos son vulnerables a actos vandálicos y robos, la situación se vuelve aún más alarmante. Ante este panorama, muchos propietarios de vehículos eléctricos optan por la comodidad y economía de cargar sus coches en casa. Sin embargo, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha lanzado una advertencia sobre los riesgos asociados a los cargadores domésticos.

Un reciente estudio de la OCU ha puesto al descubierto que uno de cada seis cargadores domésticos presenta fallos potencialmente peligrosos. Inspeccionando 31 instalaciones en diversas viviendas, se descubrió que muchos de estos cargadores, que en su mayoría son de corriente monofásica y tienen una potencia aproximada de 4,5 kW, no cumplen con los estándares de seguridad necesarios. A pesar de que cargar en casa se presenta como la mejor opción, la realidad es que no todos los dispositivos ofrecen la confianza que se esperaría.

Entre las marcas revisadas estaban V2C, Orbis, Wallbox, Veltium, Simon, Policharger, ABB y Tesla. La OCU encontró serias deficiencias en dos instalaciones, donde se sospecha que los usuarios las instalaron sin la ayuda de un instalador autorizado, lo que puede comprometer la seguridad de toda la vivienda. Durante la inspección, se identificó un diferencial inadecuado como el principal problema, junto con otros riesgos, como la incorrecta instalación de conexiones y la falta de los documentos necesarios que garanticen tanto la seguridad del cargador como del circuito eléctrico.

¡Alerta! Riesgos en tu hogar

Las pruebas realizadas incluyeron simulaciones de cortocircuitos y evaluaciones de la seguridad de cada instalación. De las 31 revisadas, cuatro mostraron deficiencias graves: dos tenían conexiones exteriores expuestas, una permitía el acceso al interior del cargador, y otra carecía de la memoria técnica adecuada, sugiriendo que la instalación no fue llevada a cabo por un profesional.

También se descubrieron defectos en los cuadros de protección, donde se confirmó la necesidad de un circuito de protección independiente para las estaciones de carga. Dos cargadores presentaron fallos graves: el interruptor diferencial no estaba calibrado correctamente y el tipo de interruptor no era adecuado para estos dispositivos.

Según la OCU, el cumplimiento de los estándares de seguridad es crucial para prevenir accidentes graves, como incendios o descargas eléctricas. Aunque la mayoría de las instalaciones revisadas era segura, hubo una que mostró un tiempo de respuesta inaceptable del diferencial, lo cual podría tener consecuencias letales.

Consejos para usuarios de coches eléctricos

Debido a estos hallazgos, la OCU recomienda encarecidamente que todas las instalaciones de cargadores de vehículos eléctricos se realicen por profesionales autorizados. No arriesgues tu seguridad y la de tu familia optando por soluciones improvisadas. Si eres propietario de un coche eléctrico o planeas convertirte en uno, ¡asegúrate de que tu sistema de carga sea seguro! La electromovilidad no solo debe ser accesible y cómoda, sino también segura. ¡Cuida de ti y de los tuyos!

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