Marina Ortiz Cortés

28/03/2025

Actualizado a las 20:08h.

Marius Borg, el hijo mayor de Mette-Marit, la esposa del príncipe heredero de Noruega, se enfrenta a una nueva y alarmante acusación de violación, marcando la cuarta ocasión en la que se ve implicado en un escándalo de este tipo. La reciente denuncia, que proviene de una joven de 20 años, se suma a una lista creciente de alegaciones que han enturbiado el nombre de la familia real noruega desde que la investigación se inició en agosto del año pasado.

De acuerdo a informes del canal noruego TV2, la violación habría ocurrido en un hotel en Oslo en noviembre de 2024, es decir, poco después de un altercado violento que Marius tuvo con su novia anterior, lo que llevó a su detención. El abogado John Christian Elden ha confirmado que está representando a la nueva víctima, quien presentó la denuncia en febrero. La joven ha sido interrogada varias veces por las autoridades, mientras que Marius todavía no enfrenta nuevos cargos ante la justicia.

Los antecedentes de Marius son alarmantes. Además de esta nueva acusación, ya enfrenta cargos de dos violaciones previas y varios incidentes de violencia doméstica, incluyendo acusaciones de maltrato por parte de exnovias. En una revelación impactante, se descubrió que la policía halló en el móvil de Marius fotografías y vídeos de una agresión, lo que pone en entredicho su carácter y comportamiento. En un caso previo, una de las víctimas, Linni Meister, no tenía conocimiento de las imágenes que las autoridades le presentaron, lo que añade un nivel más de gravedad a la situación.

La última acusación ha despertado una ola de especulaciones y análisis en los medios noruegos y daneses. Recientemente, Marius fue visto en Copenhague, lo que ha llevado a la prensa a preguntarse si su viaje fue una manera de evadir un nuevo interrogatorio policial o si simplemente buscaba desahogarse en la vida nocturna de la capital danesa.

Con el tiempo corriendo en su contra, se anticipa que la investigación se concluye en primavera y que el proceso judicial podría iniciarse durante el verano. Esta situación es una tormenta perfecta para el hijo de Mette-Marit, ya que cada cargo de violación conlleva una posible pena de hasta diez años de prisión. Si se acumulan condenas por abuso, la situación se tornaría aún más sombría.

La familia real está bajo un intenso escrutinio y las repercusiones de estos escándalos podrían afectar no solo a Marius Borg, sino también a la imagen pública de la realeza noruega. Lo que parecía ser una familia real ejemplar ahora se ve sumida en un escándalo que deja a muchos preguntándose: ¿Qué más saldrá a la luz con el tiempo? La sociedad espera respuestas y Justicia.