La preocupante situación de seguridad en las Tres Mil Viviendas ha llevado a la Policía Local de Sevilla a tomar una decisión drástica: dejar de ingresar en la zona acompañados por los servicios de limpieza de Lipasam. "No podemos jugar con la vida de las personas", subrayó el delegado sindical de CSIF, Santiago Raposo, quien ha denunciado la vulnerabilidad de los agentes frente a armamento de alto calibre, como el AK-47.

Recientemente, la situación ha escalado al punto de que el presidente del Sindicato de Profesionales de Policías Municipales de España en Sevilla, Luis Val, ha exigido cambios inmediatos en los protocolos de entrada y acompañamiento para proteger no solo a los agentes, sino a todos los trabajadores municipales que operan en la zona. Estos temores son el resultado de tres tiroteos ocurridos en un periodo de 72 horas, que han sembrado el pánico entre los profesionales.

Según Val, la sofisticación del armamento utilizado por los clanes de la zona se ha visto favorecida por la crisis actual en Ucrania, donde adquirir armas se ha vuelto más accesible. Esta situación no solo preocupa a los policías locales, sino también a sus colegas del sindicato Jupol, que ha instado al Ministerio del Interior a dotar con "armamento especializado y vehículos blindados" a los cuerpos de seguridad que operan en la zona.

Mientras tanto, los servicios públicos de la barriada de Murillo en el Polígono Norte se verán interrumpidos, ya que los empleados de Lipasam no contarán con el acompañamiento policial que consideraban esencial, sobre todo después de los recientes incidentes. La situación ha llevado a los representantes sindicales a advertir que la Policía Local no tiene los recursos necesarios para hacer frente a la delincuencia armada, poniendo en riesgo la seguridad de los ciudadanos.

El clima de violencia ha generado una creciente sensación de inseguridad en la comunidad, y los sindicatos están vigilantes ante posibles cambios por parte de la Jefatura de Policía. “No podemos arriesgar la vidas de aquellos que trabajan para la comunidad”, concluyeron los representantes sindicales, destacando la necesidad urgente de implementar medidas que garanticen la seguridad tanto de policías como de la ciudadanía.