El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha puesto el ojo en Alphabet, la empresa matriz de Google, acusándola de abuso de su posición dominante en el mercado, similar a lo que ocurrió en el pasado con Microsoft. La Administración actual ha solicitado a los tribunales que obliguen a la compañía a implementar cambios radicales en su estructura de negocio, exigiendo la venta de su popular navegador Chrome y del sistema operativo Android.

¿Qué significa esto? Actualmente, Google controla una asombrosa cuota del 90 % del mercado de búsquedas en línea en EE.UU. y llega al 95 % en dispositivos móviles. Washington busca que la empresa rompa su monopolio, lo que implicaría no solo la venta de Chrome, sino también de Android y Google Play, un movimiento que Alphabet ha calificado de drástico.

El Departamento de Justicia también busca que Google cese de pagar miles de millones de dólares al año a socios como Apple para que el buscador de Google sea el predeterminado. “Google debe vender Chrome de inmediato a un comprador aprobado. Esta medida, a juicio del Departamento, es fundamental para la competencia del mercado”, indicaron en su propuesta judicial.

Una sanción similar ya ha sido considerada por las autoridades, ya que Google enfrentó un revés judicial en agosto por violar leyes antimonopolio en el sector de motores de búsqueda. Parece que la batalla está lejos de concluir, ya que la compañía planea apelar la decisión y el caso podría llegar hasta el Tribunal Supremo.

Además, en septiembre, Google se enfrentó a un juicio que cuestionaba la redirección de su gasto publicitario hacia su propio negocio tecnológico, lo que ha aumentado la presión sobre la compañía.

Lee-Anne Mulholland, vicepresidenta de asuntos regulatorios de Google, se ha manifestado en contra de la separación de Chrome y Android, argumentando que estas plataformas se ofrecen de manera gratuita a los usuarios. “Interferir de esta forma perjudicaría a consumidores, desarrolladores y el liderazgo tecnológico de EE.UU.”, afirmó recientemente.

El posible valor de Chrome si llegara a la venta podría alcanzar los 20.000 millones de dólares, según informes de medios estadounidenses. Este radical movimiento por parte de la Administración de Joe Biden se produce en un contexto político incierto, ya que el demócrata dejará el poder en tan solo dos meses y, a pesar de que Donald Trump ha expresado su intención de investigar a Google, no se ha pronunciado acerca de dividir sus operaciones.

Además, la Asociación de Internet y Redes Competitivas (INCOMPAS) ha alertado sobre cómo estas acciones podrían impactar negativamente en el mercado, poniendo en riesgo la innovación y la competencia. El futuro de la tecnología en EE.UU. parece estar en una encrucijada fascinante. ¿Estamos ante el inicio de un nuevo capítulo en la regulación de las grandes tecnológicas? ¡No te pierdas las próximas jugadas en este emocionante drama empresarial!