
La CNMC se prepara para dar luz verde a la opa BBVA-Sabadell en abril: ¿qué implica esto para el mercado?
2025-04-02
Autor: Francisco
La oferta pública de adquisición (opa) lanzada por el BBVA sobre el Banco Sabadell a principios de mayo del año pasado está alcanzando un momento crítico en su proceso. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) está finalizando su dictamen sobre esta integración y se espera que lo apruebe en abril. Aunque hay probabilidades de que surjan imprevistos en el camino, la mayoría de los análisis apuntan a que la decisión se tomará después de la Semana Santa.
El presidente del Sabadell, Josep Oliu, expresó recientemente su escepticismo, sugiriendo que la CNMC podría pronunciarse en mayo, una afirmación que refuerza la incertidumbre que rodea a la operación. Desde el banco catalán se ha reclamado que un nuevo análisis de mercado considere no solo la opinión de otros bancos, que se beneficiarían de la salida de un competidor, sino también la de varias asociaciones empresariales y sindicales que se oponen a la opa, argumentando que afectará negativamente el acceso al crédito de las pymes y la generación de empleo.
Se estima que la CNMC podría necesitar hasta tres semanas adicionales para llevar a cabo el proceso de consulta, lo que podría retrasar la aprobación hasta principios de mayo. Sin embargo, la expectativa general es que finalmente se pronuncien a favor de la operación con ciertas condiciones o compromisos que BBVA ya ha comenzado a negociar para abordar las preocupaciones sobre la competencia en el mercado.
Es importante señalar que este proceso se ha alargado más de lo habitual debido a la complejidad de la fusión y sus implicaciones sociales y políticas. A medida que avanza la situación, está claro que la CNMC está llevando a cabo un análisis exhaustivo, lo que podría generar un impacto significativo no solo en el sector bancario, sino también en la economía española en su conjunto.
Si se produce la aprobación en el marco previsto, el Gobierno español, que ha estado monitoreando la situación con preocupación, podría decidir intervenir. Según la legislación de competencia vigente, el ministro de Economía tendría un plazo de quince días para evaluar la decisión de la CNMC y actuar en consecuencia. Este escenario ha puesto aún más presión sobre ambas entidades: el Sabadell enfatiza los riesgos económicos de la fusión, mientras que BBVA redefine su postura enfatizando que su opa es un impulso hacia el financiamiento de las empresas, un aspecto esencial en la recuperación económica.
Con todos estos factores en juego, el futuro de esta amplia fusión y su impacto en el mercado y en la economía nacional están en la cuerda floja, atrayendo la atención de analistas y economistas por igual. Estaremos atentos a todo lo que ocurra en las próximas semanas, ya que la resolución del caso tendrá repercusiones que podrían cambiar el panorama bancario en España.